Jesús prometió a sus discípulos que el espíritu santo, que él llamó "el ayudante", nos enseñará todas las cosas volviendo a nuestras mentes todas las cosas que él enseñó. (Juan 14:15-17, 26) Eso, por supuesto, requiere que nos familiaricemos con todas las cosas que Jesús enseñó; sí, incluyendo todas las cosas que están escritas en la Palabra de Dios, la Biblia que Jesús citó en su enseñanza. (Romanos 15:4, 1 Corintios 10:11) Es el espíritu de Dios el que nos enseña, y aparte del espíritu de Dios, ninguno de nosotros podría conocer o comprender la verdad. (Lucas 8:9,10; Hechos 7:51) Cuando Jesús dijo que debemos adorar al Padre "con espíritu y verdad", de este modo también nos estaba asegurando que es posible que conozcamos la verdad, porque sin tener la verdad, nuestra adoración sería en vano. (Juan 4:23,24)

Supongamos que tienes una pregunta que necesita respuesta. ¿Cómo haces para obtener la respuesta? Un anciano explicó una vez los medios simples por los cuales podemos encontrar la respuesta a cualquier pregunta, dentro de un corto tiempo, en las publicaciones de la Sociedad, especialmente la Atalaya. ¿Debemos suponer que el espíritu de Dios nos ayudará a recordar la información que leemos en La Atalaya? ¿No nos enseña el espíritu más bien al ayudarnos a recordar lo que hemos leído en la palabra de verdad de Dios, tal como Jesús se refirió a él? (Juan 17:17) Para que el espíritu nos enseñe, "recordando a nuestras mentes" todas las cosas que hemos leído en la Palabra de Dios, requiere que primero nos familiaricemos con su contenido, todo, desde de principio a fin. Esa es nuestra responsabilidad individual. (Salmos 1:1-6; Deuteronomio 18:18-22; 1 Juan 4:1). Leer la Palabra de Dios regularmente nos ayuda a familiarizarnos con los pensamientos de Dios y su manera de hacer las cosas, que puede ser tan diferente de los hombres, incluido el nuestro. (Isaías 48:17-19; 55:8-11)

El Memorial anual de la muerte de Cristo este año es el 31 de marzo de 2018, un sábado. Y todos los asistentes se enfrentarán a una decisión. ¿Qué decisión? Si obedecer o no el mandato de Jesús de "seguir haciendo esto en memoria de mí". (Lucas 22:19,20) El orador explicará por qué la mayoría de los asistentes están allí simplemente como observadores y no deben participar de los emblemas, aunque el pan y el vino se pasen de persona a persona. En muchas congregaciones, ni siquiera habrá una persona que participe. La Atalaya de enero de 2018, en uno de sus artículos de estudio (páginas 12-16), proporciona la explicación de la Sociedad sobre su comprensión de lo que es el Memorial y cómo debe ser observado. ¿Qué harás? ¿Por qué no ir a Jehová en oración y pedirle ayuda, porque quieres adorarlo con espíritu y verdad? Jehová responderá a tu oración "volviendo a tu mente" las cosas que has leído en su Palabra que son aplicables a tu pedido; y su espíritu santo te ayudará a entenderlo. (Santiago 1:5-8)

Jesús dijo con firmeza a sus oyentes, especialmente a los escribas y fariseos, que si alguien invalida la palabra de Dios por sus propias enseñanzas, doctrinas o tradiciones, entonces esa adoración es en vano, inútil, no solo inaceptable para Dios, sino también ofensiva a él. (Mateo 23:1-3, 13-15, 27,28; Revelación 22:18,19) ¿Es el ritual del Memorial, como se observa en nuestro Salón del Reino, basado en la palabra de verdad de Dios, o en las enseñanzas y tradiciones que se remonta a Joseph Rutherford, como lo enseñó en la década de 1930? Según sus enseñanzas y expectativas, a mediados de la década de 1930 se creía que el número de legítimos participantes del pan y el vino se había completado en número (144'000), y por lo tanto se esperaba que el número de participantes disminuyera a partir de ese momento; mientras sus amigos, que asistían como meros observadores, continuarían aumentando hasta que todos los participantes hubieran sido llevados al cielo para estar con Cristo Jesús, señalando así el final de cualquier celebración conmemorativa adicional.

Contrario a sus expectativas, en los últimos años la cantidad de participantes ha aumentado, lo que hace que la Sociedad revise su creencia de que el número total de ungidos se completó hace décadas. Pero, nos podemos preguntar, ¿es el aumento en el número de participantes en el Memorial no necesariamente debido a que muchos más en los últimos años han llegado a creer que gobernarán con Cristo en el cielo, sino porque muchos de los fieles y obedientes sirvientes de Dios han llegado a entender que el mandamiento de Jesús de "seguir haciendo esto en memoria de mí" se aplica a todos sus verdaderos discípulos, sin excepción? Según las Escrituras, el Memorial de Jesús no se trata de quién tiene qué recompensa, ya sea la vida eterna en la tierra, o gobernar con Jesús en su reino, sino acerca de "proclamar la muerte del Señor hasta que llegue". Y el hecho de que todavía estamos "proclamando la muerte del Señor" manteniendo el Memorial anual es evidencia de que Jesús aún no ha llegado. (Mateo 5:5; 19; 27-29; Revelación 7:1-4; 14:1; 20:6; ver la explicación de La Atalaya sobre este punto en el número de enero de 2018, página 16)

• Hasta el año 2005, el número de participantes disminuyó constantemente, momento en el que alcanzó un mínimo histórico de 8'524. Por lo tanto, en los últimos doce años, el número de participantes se ha más que duplicado de lo que era en 2005, un aumento de 10'040.

• El año pasado (2017) hubo 20'175'477 asistentes al Memorial en todo el mundo. De ellos, 18'564 participaron de los emblemas, un aumento de 551 con respecto al año anterior (una relación de 1'087 observadores por cada participante. Por lo tanto, la mayoría de las congregaciones no tienen a nadie que participe). El número que participó en 2017 fue más que en 1954, hace sesenta y tres años, cuando había 17'884 participantes del pan y el vino.